viernes

Mientras unos duermen ......


(Plaza de El Vellón, Madrid. Foto Mcartney)



....... otros viajan.

Pues eso. Que me había quedado dormido tan ricamente como me pasa muchas noches viendo la tele y abro el ojo a eso de la 1 y media. Bien. Otra noche que me toca bajar al Rufino a las tantas porque claro no le he bajado antes de cenar o cuando suelen dar las doce que es cuando le saco los días que no me quedo sobado como hoy.

Hasta aquí todo normal, pero.......

Medio dormido cojo la correa y el plumas que hace fresquete y bajo hacia la plaza donde oigo unos ruidos extraños en la trsite cabina, bueno ya sólo es un teléfono colocado en un armazón metálico, y me digo para mis adentros:

(Ya están reventando otra vez la pobre caja de las pelas del teléfono)

Pero cuando me acerco, ya sabes que yo de lejos no veo una mierda y menos de noche, me veo a dos paisanos del pueblo, ella y él, llamando a alguien. Ella está con el teléfono .......

- Qué pasa ¡¡ qué hacéis ¡¡

( ¿ ? )

- Nada que estoy llamando (ella) a Roberto para que me venga a buscar. (Roberto es su chico, su churri, o vete a saber porque yo los suelo ver, a Roberto y a ella, con gente variopointa y no siempre juntos como es el caso de ahora en que va con un amigo del pueblo que no recuerdo su nombre pero sé que se dedica a restaurar muebles)

- Que me han robado la furgoneta.....
- Que ya no está donde la he dejado.....
- Que me he quedado sin batería en el móvil.....
- Que .........

Como ya les conozco y sé que son afines a remojar sus tiempos libres, y no tan libres, en ejercicios de barra fija, sonrío para mis adentros y observo el grado de cocción de ella que es similar e incluso superior al de él.

- Pero que pasa, que te han robado la furgoneta ?

No consigo entender aún, en parte a mi torrao de estar medio dormido y el pedal de Lula que así se llama mi paisana, si la han robado la furgoneta unos chorizos, los marcianos del pueblo de al lado o que simplemente no se acuerda de donde coños la ha dejado.

- Que Roberto se ha llevado la furgoneta, que me ha dejao sin furgoneta, que ......

- Pues espera que subo con Rufino a casa y llamas a Roberto desde mi móvil para que te venga a buscar......

- Ah, vale, gracias.........

Mientas subimos los tres hacia mi casa, con cierta atención a las escaleras debido al estado pelín comatoso en que se hallan ambos, voy pensando en la extraña movida que habrán tenido para que Roberto se haya llevado la furgoneta de Lula, que así se llama mi paisana, y la haya dejado más colgada que un cuadro de Dalí. Y se me pasa por la cabeza que, en un gesto de buena vecindad, ya que alguna vez se han quedado con Rufino cuando he tenido que salir de viaje, la puedo acercar a su casa que dista no más de 4 kilómetros de la mía. La verdad es que no me apetece un pijo pero es buena gente y hoy todavía no he hecho mi buena acción del dia.

Marco el teléfono de Roberto y se lo paso.

- "Éste es el constestador automático..............."

- ¡Qué cabrón !. !Se ha dejado apagado el móvil ¡

- Bueno mujer no te apures que te acerco a tu casa en un momento, venga tomaros un zumo que es lo único que tengo y nos vamos.

Mientras tomamos el zumo me hacen halagos del mueble antiguo que tengo en el comedor, él, y Lula que efectivamente lleva un tablón del 14 ahora que la veo con luz, no para de hablar de unos bonsais que ha vendido hoy y algo más que no acabo de entender debido al torrao etc. etc etc......

Bajamos a la calle y tras arrancar, Lula todavía insiste en que nos acerquemos al sitio donde había dejado la furgoneta que, efectivamente, no está allí.

- !Ves¡. Aquí estaba y se la ha llevado el muy cabrón. Le voy a matar.

De camino hacia su casa por una carretera vecinal que sale del pueblo me va contando que no es la primera vez que se lo hace y que seguramente le habrá cerrado con cadena la verja de la finca y con llave la puerta de la casa, mientras yo voy pensando si la cosa aún se va a complicar más, así que decido despertarme completamente porque me temo que voy a necesitar estar bastante despierto para lo que pueda pasar. ¿ Y si me encuentro con Roberto en la puerta y con una bronca de pareja sin quererlo ni beberlo ?. La cosa promete.

Vamos charlando sobre que todos los problemas se resuelvan igual, sobre que estoy estupendo de amores, por hablar de otra cosa y no cargar más las tintas cuando tras entrar por un camino adyacente a la carretera vecinal por fin llegamos a la verja de su finca donde, efectivamente, se halla la susodicha furgoneta.

- ¿Ves?, se la ha traído y me ha dejado colgada. Qué cabrón. Le voy a matar.

Transcurren entonces como cinco minutos de improperios mientras Lula no para de subir y bajar la mano derecha cuando finalmente me pregunta:

- ¿Cómo COÑO se abre la puerta del coche?

(Sonrisa en la penumbra)

Le abro la puerta alargando mi mano derecha y mientras hago una maniobra de riesgo 10 para girar ciento ochenta grados, el camino hacia la finca no tiene más de dos metros de ancho, y enfilar el camino en sentido contrario, Lula hurga a oscuras el candado de la verja exterior con poca fortuna compruebo cuando vuelvo a detenerme delante de la valla esta vez ya enfilado en la buena dirección de salida del camino.

Salgo del coche dejando la corta encendida para que se alumbre algo y encuentre entre un manojo de llaves que parece el del aparcacoches del Pachá Benidorm la maldita llave del candado.

Mientras tanto y para dar un ligero toque de tensión a la escena, un coro de unos 20 perros que son la familia adoptada de Lula nos dan la bienvenida o la alarma para que se despierte Roberto que debe estar sobando a moco tendido.

Tras varios intentos fallidos, Lula por fin, consigue abrir el candado de la verja y nos despedimos tras darme las gracias una vez más y desearme que sus "dioses" me ayuden tanto a mi como le han ayudado a ella esta noche.

Consigo sin mucho problema atravesar el camino adyacente a la carretera y salgo en dirección a mi pueblo oyendo un tema precioso de Luis Salinas que llevo en el coche entre mis refritos musicales de cedés.

Y voy pensando en que a veces las cosas pasan por algún motivo que se me escapa, pero que está ahí. Que si esta noche no me hubiera quedado dormido viendo la tele como otras tantas, no habría bajado a esa hora a la calle a Rufino, y no me habría encontrado con mi paisana Lula y con su amigo el restaurador de muebles y con la cabina de teléfonos y con la aventura de que te roben la furgoneta.

O que te dejen colgado a 4 kilómetros de tu casa a las 2 de la mañana.

Buenas noches.

9 > > > > Centímetros:

Tesa dijo...

Jo, con lo bien que se está en la cama a esas horas.
...Qué mayor me estoy haciendo.

Me voy a Córdoba a pasar la Noche Blanca. Cante flamenco, guitarras, palmas y mucha taberna. Ya te contaré...

Anónimo dijo...

Uf. Pues yo soy muy aficionado a andar por la calle a esas horas...
Sí, algunas cosas de ese tipo ya me han pasado, pero qué quieres: la vida sin "accidentes" es muy aburrida.

Mcartney dijo...

Vecina:
Tranquila que lo disimulas muy bien.
Y nada de rebujitos que, amén de una orterada de nombre manda güevos, son para nenazas. Tú al fino, el palo cortado, y la manzanilla, que ésos si que dejan la cabeza tonta y sexualmente incorrecta.

Mcartney dijo...

Güalker:
Diga usté que si. Y además son fuente de inspiración para blogueros atascados.

Miguel Baquero dijo...

Pues tienes toda la razón, en que si todo hubiera ocurrido según lo establecido hubieras paseado al perro a sus horas y no te habria pasado esa aventura. Aunque yo también te digo que a la una y pico veo a unos paisanos en la cabina y procuro escaquearme; creo que me gusta más seguramente leer las aventuras que vivirlas

Anónimo dijo...

esto... a que hora hay que estar en la cabina?... jajaja... si eggg que, lo que no te pase a tí... p'habernosmatao... y a todo esto, el rufino con su peculiar cara de... no entiendo ná de ná... un kiss para el taxista nocturno de la habana, osea... me apunto a una birra en el calzada con su tapa de pizza o chipirones y un buen cante después.

Fiebre dijo...

Tú eres un hombre.
Un buen hombre como la copa de un pino.
Y punto pelota.

Mcartney dijo...

Mike:
Es que las cabinas de mi pueblo son muy acogedoras e inspiran el contacto humano.

Anónima:
Para dejar que la vida te moje hay que llevar puesto el bañador.

Fever:
Muchas gracias por esos aplausos tan espontáneos como merecidos.

MTeresa dijo...

Lo de sacar al perro
a esas horas
me ha pasado a mitambién
mil veces m+-
nada sin embargo como lo tuyo
¡para escribir una buen a
anecdota!